Sí, vuelvo a la carga con Lourditas, pero éste blog sólo pretende ser la proyección de las canciones que pasan por mi cabeza a diario, y el primer trabajo de Russian Red I love your glasses, más que un disco es ya un amigo para mí. Nadie ha pasado tanto tiempo conmigo en las últimas semanas, hemos compartido horas de soledad e intimidad, caladas e incluso cafés, y creo que puedo afirmar sin rubor que pocas personas lo conocen tan bien como yo. Está claro que el hecho de que dentro de poco más de un mes la vaya a ver en concierto influye, y mucho, pero la verdad es que soy incapaz de dejar de escucharla. Russian Red ha supuesto para mí el nacimiento de una voz que puede marcar una época, una de ésas estrellas que, si te fijas bien en el cielo, brillan con más fuerza que las demás. Allí donde suena una canción de Lourdes queda una estela del polvo de estrellas que desprende su voz, un rastro que te obliga a seguirla allá donde vaya irremediablemente. Lo más importante de la música son las imágenes que te trae a la cabeza el escuchar una canción, las cosas que puedes llegar a sentir a través de una voz o un simple acorde de guitarra, y creo que ésa es precisamente la razón por la que estoy tan impresionado con las canciones de I love your glasses. De un tiempo a ésta parte, se me activa la sonrisa inevitablemente cada vez que escucho a Lourdes, porque mi cabeza, además de pájaros, se me llena de palabras, pensamientos e imágenes mucho más bonitas que el propio rostro de la cantautora. Y es que Russian Red es, hoy, la banda sonora de mis días y, la verdad, a pesar del frío, la lluvia y el viento, yo lo único que veo es un sol, enorme además. Sí, parafraseando a Ismael Serrano, sólo yo me entiendo y no me entiende nadie...;)
Os dejo con Gone, play on, un tema que convierte la sangre en escarcha, un directo en el que, como vais a poder ver, el silencio se puede masticar. Y es que, a pesar de verlo desde casa, me da miedo hablar o estornudar mientras se reproduce el vídeo, no la vaya a molestar...
...This never ending song is scratching, scratching my brain like a vinyl in desire...
4 comentarios:
Yo ya he pasado "mi etapa Russian Red" y el concierto de este viernes me lo ha demostrado.
Tiene unas hermosas canciones, al igual que su voz y que ella misma. Pero ya cansa. Cansa escucharla en todos los lados, que veas de lejos a un amigo venir con tengo algo que te va a encantar y tú te sonrías y sepas antes que él te lo diga, que es Russian Red lo que te va a poner.
Sin duda uno de los discos del año y el descubrimiento (junto con Vetusta Morla) de este 2008 que se acaba. Pero el concierto de Valladolid me hizo replantearme las cosas... ¿por qué me has dejado de enamorar, Lourditas? :(
Aunque de momento no me sucede lo mismo que a tí con Lourdes, te entiendo bastante bien. Hace mucho que escuchamos su disco, pero entre el anuncio de helados y que salió en el Hormiguero estos días está hasta en la sopa. De todas formas, yo ahora mismo estoy en plena ebullición Russian Red, y dudo que se me pase, al menos hasta que la vea en concierto en enero.
Saludos tío!
¡A mí también me gusta la chica oye!! Y eso que soy un pollo de gustos autóctonos! pero la calidez de su voz encandila.
Un saludo amigo, te sigo la pista!!
SP
Ey Señor Pollo!
Cuánto tiempo! Espero que todo vaya bien!
Imposible resitirse a la voz de ésta chiquilla...
Un abrazo amigo!
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