Conocí a María Blanco el último verano, era el mes de agosto y daba un concierto en Bilbao con mi amigo Zarra. Me bastó enseñarles un par de canciones suyas a mis amigos para convencerles de ir a verla, y todos (yo incluído, por supuesto), volvimos en una nube después de comprobar que tiene una de las mejores voces que uno pueda escuchar. María, o Mäbu, que es como se hace llamar ahora, es de esas personas que han nacido para estar encima de un escenario, y a pesar de su exagerada juventud, esta madrileña está sobrada de talento y tiene una simpatía natural que hace que el público caiga rendido a sus pies irremediablemente. Sé que cada vez actúa en más locales de Madrid, y por lo que me dicen, cada día lo hace mejor, lo que ignoro es si está trabajando en la grabación de un disco que, tarde o temprano, caerá por su propio peso. Hoy os dejo dos fugaces fragmentos de Dos horas y Quiéreme, un par de minutos de canciones que, como María, dibujan sonrisas, ya lo vereis...
Dos horas
Quiéreme
2 comentarios:
Que voz tan bonita tiene, es un gustazo escucharla cantar.
La verdad es que tiene una voz preciosa la chica, y es taaaan simpática... ;)
Saludos!
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